Anticonceptivos hormonales y salud mental: ¿Qué impacto tienen en las mujeres?
En las últimas décadas, los anticonceptivos hormonales se han convertido en uno de los métodos más utilizados por las mujeres para controlar su fertilidad y tomar decisiones sobre su maternidad. Pero, más allá de sus beneficios, ¿somos realmente conscientes de cómo pueden afectar a la salud mental de quienes los consumen?
Desde la psicología, es fundamental visibilizar esta realidad y promover un abordaje integral de la salud femenina que no solo contemple el bienestar físico, sino también el psicológico y emocional.
¿Qué dicen los estudios sobre los anticonceptivos hormonales?
Una revisión sistemática reciente, centrada en mujeres iberoamericanas en edad fértil, ha revelado datos que merecen atención:
- Casi el 75% de las mujeres que usan anticonceptivos hormonales experimentan algún efecto adverso.
- El 25,8% presenta variaciones en el estado de ánimo, incluyendo irritabilidad y cambios en la reactividad emocional.
- Hasta un 20% sufre síntomas depresivos o alteraciones en la libido.
- Se registran también trastornos físicos como aumento de peso (70%), alteraciones menstruales (73,3%) o molestias gastrointestinales (40,5%).
¿Cómo afectan a la salud mental?
Las hormonas sexuales femeninas, como el estrógeno y la progesterona, no solo regulan el ciclo menstrual, sino que también influyen en funciones cerebrales vinculadas al estado de ánimo, la memoria y el comportamiento. Al modificar estos niveles hormonales, los anticonceptivos pueden desencadenar o agravar síntomas como:
- Ansiedad
- Irritabilidad
- Tristeza persistente
- Cambios en la libido
Algunas mujeres experimentan estos efectos de forma leve y transitoria, mientras que otras pueden ver afectado su bienestar emocional y su calidad de vida.
No podemos olvidar que la anticoncepción ha supuesto un avance enorme en la libertad de las mujeres para decidir sobre su maternidad y sus proyectos de vida. Sin embargo, sigue existiendo una carga desproporcionada sobre ellas en cuanto a la responsabilidad de la salud reproductiva, reflejo de estructuras sociales y normas de género profundamente arraigadas.
¿Qué podemos hacer como profesionales de la psicología?
Desde nuestra clínica, consideramos fundamental:
- Valorar la salud mental de las mujeres que utilizan anticonceptivos hormonales en consulta.
- Fomentar espacios de escucha y acompañamiento donde puedan expresar sus dudas, malestares o experiencias.
- Colaborar con otros profesionales de la salud para ofrecer información rigurosa y acompañar en la toma de decisiones informadas.
Conclusión sobre los anticonceptivos hormonales
La anticoncepción es una herramienta de empoderamiento femenino, pero no podemos perder de vista su impacto sobre la salud mental. Hablar de ello es dar un paso más hacia un cuidado integral de la mujer, donde cuerpo y mente se atienden por igual.
Si te identificas con algunos de estos síntomas o tienes dudas sobre tu método anticonceptivo, no dudes en pedir cita. Cuidar de tu salud mental también es un acto de autocuidado y prevención.
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